Vigilante
vamos a jugar al juego de las mentiras
¿Vigilantes
sabe jugar? —¡No!—
Hoy
lo haremos con el juego de las mentiras.
¿Te
atreves? —¡Sí!—
Pues
¡Hala! Vamos a empezar.
Verás
cómo es fácil. Se te dará bien. El mentir es facilillo. No nos demoremos más.
Empecemos pues.
La
cosa es así,
Ahora
que vamos despacio, y tan despacio, que nunca llegamos, vamos a contar
mentiras, tralara, vamos a contar mentiras, de verdad.
Venga
empiezo yo con una, y tú la has de continuar.
—Cómo
vamos muy despacio, nos pondremos a luchar, por un buen convenio, sobre todo el
de seguridad.
Continuaremos
con otra mentira,
—Vigilante
todos a la calle, a la calle a protestar, como estamos muy unidos, a todos nos
escucharán.
Ves,
es fácil, sólo es ponerte, vamos a por otra,
—En
la calle todos juntos, en concentraciones nos vemos, no importa el lugar, ni el
momento del encuentro, todos nos centramos por la marcha popular.
Qué
bien se te da mentir, sólo es ponerse y las mentiras salen solas. Bueno, a ver
si sale otra.
—Los
vigilantes juntitos no dejan de protestar por las agresiones sufridas que
reciben ellos nada más.
¡Ahí!,
¡Ahí! En ese sitio y lugar, le has dado en el singular, yo creo que yendo a por
la última, estaríamos cumplidos. Pues entonces, a por la
"refinitiva".
—Como
era de esperar, los vigilantes unidos luchan y luchan, no lamentándose jamás.
Ves,
todo ha salido a pedir de boca, sobre todo eso "de boca". Sólo nos
queda decir, que somos cojonudos, y para rematar, lo que nos queda es narrar,
todos a una, y esto se zanjará.
Aquí
quedan las mentiras de los vigilantes de seguridad, jugando y jugando, las
dejan caer y, todos callados a casa otra vez.
Mañana
más, que hoy es tarde.
bayekas
No hay comentarios:
Publicar un comentario