Páginas

domingo, 24 de marzo de 2019

Canuto, mi fiel amigo (24.03.2019)

Canuto, mi fiel amigo (24.03.2019)

Hace un tiempo, en un lugar donde no llego a recordar, encontré a mi fiel amigo Canuto. Hoy él es feliz conmigo y yo con su compañía. No dudó en decirlo, me invade una energía nueva, una alegría desmesurada cada vez que estoy con él. Mi amigo Canuto ha ocupado, lo está haciendo, un gran espacio en mi vida. No sé qué sería de mí sin él. Me ha hecho sociable, amable, desinteresado, me paso el día riendo.

A donde vaya, viene conmigo, no me importa donde sea, si no le acepta, no me quedo o simplemente no voy al lugar donde me prohíben estar con mi amigo Canuto. Es así de sencillo. No le doy más vuelta al asunto.

Hace tiempo de aquello, pero mi amigo Canuto me salvó la vida, hoy es muy importante para mí su presencia, su compañía, sin él, creo yo, no tendría sentido mi vida. Cómo he mencionado, mi amigo Canuto en un momento de arrebato me impidió que cometiera una locura que daría al traste con todo futuro que tenía y tengo por delante. Vino a darme esa serenidad, tranquilidad, sosiego y paz que tanto necesitaba, anhelaba.

En aquella época estaba pasando un mal trance, esto me llevó a una profunda depresión, y estando inmerso en ella, circunstancialmente, intenté hacer algo no que era bien visto por esta sociedad carca. ¡Menos mal que lo se llegué a consumar! Y todo, gracias a mi fiel amigo Canuto, pues en ese preciso instante, él vino a mi vida, con él, con su presencia, dejé de lado esa decisión fatal que iba a tomar.

Hoy soy muy feliz, miro al futuro con otra perspectiva, desde otro prisma. Mi vida ha cambiado radicalmente. Como he dicho, mi amigo Canuto va conmigo a todos los lados. Me hace reír, me hace hablar, hace que pierda el pudor, el miedo. No, no, es que me convierta en un héroe, que va, es algo distinto, algo que no puedo explicar con palabras. He descubierto sensaciones nuevas. Me hace sentirme otra persona distinta, estar en un mundo más sociable, más humano, y, sobre todo, aleja de mis los malos pensamientos, así como las acciones, que posiblemente me perjudiquen.

Hoy soy otra persona diferente, y todo, gracias a mi inseparable amigo Canuto.

Saco mi petaca de tabaco rubio, mi papel de liar, y cómo no, mi china de hierba buena y olorosa, la caliento un poco con el fuego del mechero, la mezclo con un poco de tabaco, lo lío con papel de fumar. Y ya tengo a mi amigo Canuto preparado para hacerme compañía y ser más feliz, más persona. Y a otra cosa mariposa.

Hoy puedo decir, Canuto que feliz y contento me haces, me has convertido en todo un personaje.

bayekas

No hay comentarios:

Publicar un comentario